Estas ruinas que ves – jorge ibarguengoitia

JORGE IBARGÜENGOITIA
ESTAS RUINAS QUE VES

Estas ruinas que ves fue escrita en 1974 y obtuvo el Premio Internacional de Novela «México» de 1975. Es la primera de las novelas de Jorge Ibargüengoitia cuya acción se desarrolla en la entidad imaginaria que el autor ha llamado «el Plan de Abajo», una región situada probablemente en el centro de la República Mexicana. Forma por esta razón parte deun ciclo, al que pertenecen también Las muertas (1977), Dos crímenes (1979) y Los pasos de López (1981). Las cuatro novelas comparten la misma geografía ficticia. Estas ruinas que ves es, de entre ellas, la más alegre y la más imbuida de ambiente provinciano. Su protagonista y narrador es un hombre que después de vivir largo tiempo en la capital regresa a su ciudad natal contratado para darclases en la universidad. Su relato es mitad nostálgico y mitad irónico. Es la evocación de una temporada en la vida de un «intelectual de pueblo», con sus borracheras, sus noches blancas, días de campo, pleitos con desconocidos en las cantinas, cantos de tangos a la luz de la luna y, por último, sus mujeres: unas idealizadas y otras perfectamente carnales.

OBRAS DE JORGE IBARGUENGOITIA
Estasruinas que ves

Ibargüengoitia, Jorge, 1928-1983.
Estas ruinas que ves/Jorge Ibargüengoitia.-México:
Joaquín Mortiz, 1994.- 184 p. (Obras de Jorge Ibargüengoitia).
Novela mexicana 1 t. II serie.

Edición original [Nueva Narrativa Hispánica], 1975

Primera edición en Obras de Jorge Ibargüengoitia
octubre de 1991
Segunda reimpresión, mayo de 1994
Jorge Ibargüengoitia,1975
Herederos de Jorge Ibargüengoitia
D. R. ® Editorial Joaquín Mortiz, S. A. de C. V.
Grupo Editorial Planeta
Insurgentes Sur 1162-3o., Col. del Valle
México, 03100, D. F.

ISBN 968-27-0413-8

Ilustración de la cubierta y fotografía de la contraportada: Joy Laville

Quien haya leído la primera edición de este libro notará que en esta segunda edición hay un cambionotable en el último capítulo, «Los adioses». Considero que el final de esta versión es más fiel a la sicología de los personajes y a la realidad.
J. M.

ESTAS RUINAS QUE VES

Los habitantes de Cuévano suelen mirar a su alrededor y después concluir:
—Modestia aparte, somos la Atenas de por aquí.
Cuévano es ciudad chica, pero bien arreglada y con pretensiones. Es capitaldel estado de Plan de Abajo, tiene una universidad por la que han pasado lumbreras y un teatro que cuando fue inaugurado, hace setenta años, no le pedía nada a ningún otro. Si no es cabeza de la diócesis es nomás porque durante el siglo pasado fue hervidero de liberales. Por esta razón, el obispo está en Pedrones, que es ciudad más grande.
—Los de Pedrones —dicen en Cuévano— confunden lograndioso con lo grandote.
Todos están de acuerdo en que la ciudad ha visto mejores días. Para ilustrar su decadencia, suelen referirse al Oro, un pueblo fantasma que está allí cerca, que a fines del siglo XVII tenía más habitantes que los que ahora tiene Cuévano, la cual, afirman, fue una de las ciudades más importantes de la Nueva España.
—Esto que ve usted aquí —le dicen al visitante— noes más que rastrojo de lo que fue.
A lo que el recién llegado debe responder:
—¿Pero cómo rastrojo, si esta ciudad es una joya?
Si no dice algo por el estilo, corre el riesgo de ofender al anfitrión, porque la añoranza de bienes pasados que parecen tener los habitantes de Cuévano es falsa. En el fondo están satisfechos con la ciudad tal como está. Creen que no hay cielo más azulque el que se alcanza a ver recortado entre los cerros, ni aire más puro que el que sopla a veces con fuerza de vendaval, ni casas más elegantes que las que están cayéndose en el paseo de los Tepozanes.
Son grandes innovadores. Siempre lo han sido. A esto se debe en parte que la ciudad no tenga más forma que la que le dieron los cerros, ni domine en ella otro estilo que el llamado cuevanense,…